Los mejores mercadillos navideños de Europa
Nieve, pueblos de cuento, luces y chocolate caliente: todos lo que necesitas para orquestar tu próxima escapada
Budapest, Viena, Tallin, Bruselas… Son ciudades que, entre los meses de noviembre y enero, acogen los mejores mercadillos de Navidad de Europa. En esta época, sus calles se llenan de luces, árboles de Navidad, guirnaldas y casetas entre las que pasear y disfrutar del ambiente festivo con todos los sentidos. Olores, colores y sabores que harán que os invada el auténtico espíritu navideño y que no podéis perderos si viajáis a estos destinos durante estas fechas.
1. Basilea (Suiza), una Navidad con mucho sabor
El mercadillo navideño de Basilea ha sido elegido en varias ocasiones como el mejor de Europa por diferentes organizaciones internacionales de turismo y, también, entre los propios viajeros. Las plazas de Barfüsserplatz y Münsterplatz se visten de Navidad con luces, guirnaldas y abetos iluminados entre los que podemos encontrar puestos de comida y artesanía. Todo ello con el toque elegante que caracteriza a las ciudades de Suiza.
Además de conciertos y actividades para niños, en el mercadillo navideño de Basilea se pueden encontrar delicias como quesos suizos, pan de especias o salchichas asadas y dulces típicos como el Basler Läckerli.
2. Budapest (Hungría), magia en estado puro
La explanada frente a la basílica de San Esteban se convierte en un escenario de luces doradas y decoración navideña entre los meses de noviembre y principios de enero. El medio de la plaza lo ocupa un enorme árbol de Navidad con luces de colores que se alza imponente sobre los puestos de comida húngara y artesanías. La belleza del mercadillo navideño de Budapest ha hecho que sea considerado como uno de los mejores mercadillos de Navidad de Europa.
Por otra parte, la Ópera de Budapest suele acoger en estas fechas el recital de El Cascanueces. Sin duda, una de las melodías que más suenan en infinidad de películas de Navidad. ¿Os lo vais a perder? Eso sí, debéis reservar las entradas con tiempo, ya que se agotan fácilmente.
3. Mánchester (Reino Unido), uno de los mercadillos navideños más desconocidos
El centro histórico de Mánchester es el decorado perfecto para uno de los mercadillos de Navidad más bonitos de Europa. La ciudad se llena de centenares de casitas de madera ubicadas que ofrecen comida, bebida y artesanías locales. En total, más de 350 casetas se distribuyen en diferentes puntos del centro urbano, expandiendo así el espíritu navideño por toda la ciudad. Para muchos, uno de los mejores lugares para vivir esta fecha festiva en todo Reino Unido.
4. Poznan (Polonia) y su curioso y gélido festival
Poznan es una encantadora ciudad situada a orillas del río Varta, al oeste de Polonia. Entre las plazas del Mercado Viejo y de la Libertad se establece cada año uno de los mejores mercadillos de Navidad de Europa. No solo hallaremos casetas de madera con gastronomía y artesanía, sino que el centro histórico de Poznan suele acoger cada año un festival de esculturas de hielo.
Pero lo más destacado del mercadillo navideño de Poznan es la noria de la plaza de la Libertad. Subid a ella y obtendréis una vista mágica de la ciudad cubierta de luces doradas.
5. Viena (Austria), uno de los mejores mercadillos de Navidad en Europa
En la plaza del Ayuntamiento de Viena se hace magia en Navidad. El nombre ya lo anuncia: “Magia de Adviento en Viena”. Así se llama el mercadillo navideño que convierte el centro de Viena en un escenario de película con casetas navideñas de talleres, comida y ponche caliente. Nada como pasear entre sus puestos disfrutando del ambiente festivo y de la iluminación de la romántica capital de Austria.
Y, si estáis varios días en la ciudad, os aconsejamos reservar también una excursión a Salzburgo. Esta localidad, famosa por aparecer en la célebre película Sonrisas y Lágrimas, cuenta también con mercadillos realmente bellos y hasta un museo dedicado a la Navidad.
6. Bruselas (Bélgica), ambiente agradable y color a raudales
La capital belga también tiene un nombre para designar su mercadillo navideño: Winter Wonders. Y no es para menos, ya que todas las maravillas navideñas se reúnen entre la espléndida Grand Place y otros espacios del centro de Bruselas. No faltan la luz y la música, y a ellas se suman las norias, exposiciones y pistas de patinaje sobre hielo. ¡Bruselas es una cita imperdible en Navidad!
Además, pese a ser una ciudad muy turística, el ambiente no se siente abarrotado. Por lo que es un destino ideal para una pequeña escapada sin grandes aglomeraciones.
7. Tréveris (Alemania), pequeñas dosis de Navidad
Cada año, la plaza de la catedral de Tréveris (Trier, en alemán) se llena de puestos que proponen desde salchichas, tortitas y vino caliente o gluehwein, hasta espectáculos de marionetas. Todo rodeado del seductor entorno medieval de esta ciudad alemana. Os encantarán sus edificios con tejados de pizarra iluminados con las luces navideñas.
Aunque esta localidad pertenece a Alemania, son muchos los viajeros que llegan a esta ciudad reservando una excursión a Trier desde Luxemburgo. Ambas ciudades están separadas a menos de una hora de distancia, ya sea por carretera o vía ferrocarril.
8. Dresde (Alemania), un mercadillo de Navidad imprescindible en Alemania
Alemania gana en esta lista de los mejores mercadillos de Navidad en Europa. El segundo mercadillo de Adviento que merece la pena ver en este país es el de Dresde. ¿Sabíais que es uno de los más antiguos del continente? Hablamos del Striezelmarkt, cuya celebración se remonta al siglo XV, y tiene lugar en la plaza de Altmarkt, presidido por una alta pirámide.
Durante la temporada de noviembre a diciembre el espíritu navideño cobra vida en las calles de Dresde con representaciones teatrales, exposiciones y muchos más atractivos. ¿Os lo vais a perder?
9. Tallin (Estonia), para los amantes del frío y la nieve
El mercadillo navideño de Tallin recibió el premio al más bonito de Europa en 2019. El centro histórico medieval de la capital de Estonia es un escenario perfecto para albergar uno de los mejores mercadillos de Navidad de Europa. Pasear por sus calles empedradas es como trasladarse a una aldea de cuento de hadas, donde no parece tan imposible encontrarse con un duende navideño en una de sus esquinas. Con un poco de suerte, incluso disfrutaréis de este lugar en un día de nieve. ¿Qué más se puede pedir?
Si no voláis a Tallin, pero estáis en el sur de Finlandia, no podéis dejar pasar la oportunidad de dar un salto al otro lado del mar Báltico para explorar este mercadillo de Navidad. Para ello, podéis reservar la excursión a Tallin desde Helsinki.
10. Madeira (Portugal), una Navidad con temperaturas agradables
Diferente, así es el mercadillo navideño de Madeira. Aquí no encontraremos copos de nieve ni tejados blancos, pero destaca por ser el mercado con más luz de toda Europa, según un ranking The Best European Destinations. En sus puestos se pueden encontrar flores, comida y productos de artesanía, además de grupos folclóricos y cantantes de villancicos. ¡Navidad en medio del Atlántico!
Como añadido, las temperaturas medias en Madeira suelen ser más agradables que las que encontramos en otras zonas de Europa. Al fin y al cabo, rondan los 13 y 7 grados centígrados. Aunque un abrigo os hará falta en estas fechas, el clima no tiene nada que ver con el ambiente invernal del resto del continente. Ideal para los viajeros que quieran huir del frío extremo.
¿Cuándo ponen los mercadillos de Navidad en Europa?
Aunque cada país tiene sus propios tiempos, lo cierto es que para la última semana de noviembre ya están colocados todos los principales mercadillos de Navidad en Europa. Si bien es cierto que algunas grandes ciudades o destinos muy populares, como Londres o Viena, se engalanan con luces y empiezan a abrir sus mercadillos incluso un par de semanas antes de estas fechas.
Como consejo, os recomendamos visitar las páginas web oficiales de los Ayuntamientos y oficinas de turismo de vuestros destinos para descubrir ahí cuándo se inicia la temporada navideña. En ocasiones, encontraréis fechas de los años anteriores, pues no suelen actualizarse hasta septiembre u octubre de cada temporada, pero os servirá para haceros una idea y poder planear así vuestro viaje.
Os aconsejamos también tomar nota de los cierres de los mercadillos de Navidad. En muchos países de Europa la decoración empieza a retirarse después del 25 de diciembre, mientras que en otros, como en España se mantiene hasta el 6 de enero aproximadamente. Una vez tengáis todo esto en mente solo quedará una cosa, ¡elegir destino y viajar!
Fuente: Civitatis
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