El "retiro administrado"
Una estafa para tomar las casas de las personas y reemplazarlas con ciudades inteligentes
El retiro administrado, también conocido como retiro planificado, es una estrategia para responder al cambio climático y al aumento del nivel del mar mediante la reubicación de personas y bienes fuera de peligro. Es un proceso en el que las comunidades, los edificios y la infraestructura se evacúan gradualmente de áreas designadas como inhabitables o peligrosas debido a cambios geológicos, clima extremo o cambio climático.
En Australia, este concepto está ganando terreno como una medida necesaria para mitigar los impactos del cambio climático, particularmente en las comunidades costeras. En Nueva Zelanda, el retiro controlado se está convirtiendo en una estrategia de adaptación necesaria para hacer frente a los impactos del cambio climático.
Esa es la narrativa oficial.
Sin embargo, la investigadora independiente Kate Mason ha expuesto cómo este siniestro esquema está utilizando modelos exagerados de los efectos del cambio climático para designar ciertas áreas como inhabitables para los humanos. Las propiedades en estas áreas no son asegurables y los precios están cayendo en picado. Por supuesto, este sería el resultado.
"¿Quién va a comprar en una zona inundable? A menos que sea un desarrollador que lo arrasará todo y construirá un complejo Smart Resilient", dijo Mason.
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En Australia y Nueva Zelanda están surgiendo pruebas impactantes de cómo se está utilizando la estafa climática para imponer un futuro tecno-totalitario de ciudades inteligentes.
Los imperialistas globales criminocráticos a menudo usan sus colonias de la Commonwealth para probar las escaladas más insidiosas de su tiranía: piense en Canadá, Nueva Zelanda y Australia durante el covid. Por lo tanto, podemos suponer que este va a ser el plan para el despliegue de su agenda de la Cuarta Revolución Industrial ("4RI") en todo el mundo.
El siniestro esquema en cuestión, llamado "Retiro Administrado", ha sido expuesto por la investigadora independiente Kate Mason en su excelente blog Substack destinado a "deconstruir las narrativas de la 4RI". La idea es que se está utilizando una "modelización" exagerada de los efectos imaginarios del "cambio climático" para definir ciertas áreas como inadecuadas para los asentamientos humanos.
Trabajando mano a mano con el Estado está la industria de los seguros, que durante mucho tiempo ha sido una parte central del corrupto imperio criminocrático, que considera que las viviendas en estas áreas son "no asegurables". Los bancos también están desempeñando su papel (¡por supuesto!), diciendo que no están dispuestos a proporcionar hipotecas para estas propiedades "no asegurables".
En su último artículo, Kate se refiere a un reportaje televisivo sobre Kensington Banks, cerca del centro de la ciudad de Melbourne, que acaba de ser declarado zona inundable.
Escribe: "Se espera que los precios de las propiedades se desplomen un 20 por ciento. Creo que eso es bastante conservador: ¿quién va a comprar en una zona inundable? A menos que sea un desarrollador que lo arrase todo y construya un complejo Smart Resilient".
Mientras tanto, en Nueva Zelanda, los residentes están en pie de guerra por los intentos de imponer la "retirada" de las zonas costeras con el pretexto de un aumento previsto del nivel del mar.
Como muestra este informe de los medios de comunicación, no están comprando la propaganda climática alarmista.
Dijo Tim Rees. "He vivido en la playa de Paraparaumu desde 1965 y la playa se está haciendo más grande. Durante 45 años he buceado en la isla de Kāpiti y las rocas siguen estando a la misma altura durante la marea baja".
Tania Lee agregó: "La ciencia no está resuelta y no hay consenso. No creemos que el nivel del mar esté subiendo significativamente y que todos nos inundaremos". El gobierno central y local no podían financiar "un proceso a esta escala", dijo. "Hasta ahora, los contribuyentes han pagado más de 4 millones de dólares por el proceso de Takutai Kāpiti. " Simplemente no podemos darnos el lujo de gastar más. Si se implementa, la retirada administrada superaría los 1.000 millones de dólares".
En cuanto a la agenda detrás de todo esto, Kate escribe:
A modo de confirmación, revela que el Consejo de Seguros de Australia, involucrado en Managed Retreat, trabaja dentro del modelo de Asociación Público-Privada y se adhiere a los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas, incluso siendo miembro fundador de los Principios de las Naciones Unidas para los Seguros Sostenibles.
La agenda del gulag inteligente de la ONU se presentó en su folleto de 80 páginas titulado "Centrar a las personas en las ciudades inteligentes: un manual para los gobiernos locales y regionales", como informamos en 2022.
También en 2022, un organismo llamado Consejo Australiano del Clima publicó un estudio que estimaba que 1 de cada 25 de todas las viviendas y edificios comerciales del país se volvería efectivamente inasegurable para 2030 debido al "empeoramiento de los fenómenos meteorológicos extremos".
Las inundaciones fluviales representaban el mayor riesgo, según el estudio, y las inundaciones repentinas y los incendios forestales se identificaron como los otros peligros principales que contribuyen a que las propiedades se vuelvan "no asegurables".
Además de pedir "reubicaciones gestionadas", el informe subraya la necesidad de "aumentar las inversiones públicas en resiliencia" y de "apoyar a las comunidades para que 'reconstruyan mejor'".
Declaró: "Los pueblos, las ciudades y las comunidades deben reconstruirse, cuando corresponda hacerlo, de una manera que tenga en cuenta los inevitables cambios futuros en el clima y los haga más resilientes".
No es de extrañar que este informe se haya presentado con orgullo en el sitio web del Foro Económico Mundial.
Fuente: Expose news
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